Para su vino, tecnología de primera

Esto es posible gracias a la tecnología de doble diafragma.




Física aplicada, muy simple: P = F/A (P = presión, F = fuerza, A = superficie de contacto). Este principio físico describe la relación entre presión, fuerza y superficie de contacto.
Si se duplica la superficie de contacto, la presión se reduce a la mitad para la misma fuerza.

Menos presión, menos rotaciones y menos ciclos de prensado dan como resultado menos turbios finos. La cantidad de lías producidas durante el prensado es hasta un 70% menor que con las prensas estáticas convencionales e incluso muchas veces menor que con las prensas no estáticas. No es infrecuente que con una preparación suave de la uva sólo se consiga un 2% de lías. Como resultado, el rendimiento neto de zumo y la calidad del mosto aumentan significativamente debido al bajo contenido en lías.

El diseño especial del cuerpo de la prensa y los canales de zumo verticales permiten que el zumo salga directamente en la posición de llenado sin tener que girar el cuerpo de la prensa.
Como resultado, el prejugo optimizado permite obtener una cantidad de zumo significativamente mayor (hasta un 30 %) que con los sistemas convencionales.

En comparación con los sistemas convencionales, conseguimos un rendimiento de hasta el 95% a presiones inferiores a 0,8 bares.
Esto es posible gracias a los cortos recorridos del mosto, la superficie perforada cuatro veces más densa de la malla del tamiz Perfect Flow y la superficie de contacto con la presión dos veces mayor.
El resultado es una calidad de mosto extremadamente alta. Los tiempos de prensado son hasta un 30 % más cortos que con los sistemas convencionales gracias al principio de prensado.

Le ofrecemos programas perfectamente adaptados a todas las variedades y tipos de uva y que controlan la prensa para obtener resultados óptimos.
Por supuesto, también puede programar libremente si tiene objetivos específicos o quiere probar algo nuevo.

Nuestros productos garantizan una menor presión de prensado y hasta un 50 % menos de aire comprimido, tiempos de prensado más cortos y una limpieza más rápida y simplificada.
Todo ello se traduce en una mayor eficiencia energética y es bueno para el medio ambiente y para su bolsillo.